La verdad es que la actividad es una de las mas divertidas que he realizado, no solo nosotros participabamos, sino que tambien la gente del lugar, con sus bromas y preguntas como por ejemplo: ¡cuidado con el hoyo! o ¿estan jugando a la gallinita ciega?. Fue gracioso ver a la Javi oliendo todo sin poder distinguir las cosas como cuando la acercamos a un cajon con frutillas y ella olia perejil o cuando olia pan todo el pasillo y cuando al fin llegabamos al puesto de pan el olor se iba para ella, es extraño pero la vista es mas fuerte que los otrs sentidos, dependemos mucho de ella, y tal vez podia ser que el olor se fuera pero cuando yo miraba las cosas sabia a que tenia que oler y que ese olor estaba ahi, puede ser que nos sugestionemos solo con ver las cosas.
Más tarde cuando llegamos a la universidad pusimos los productos que habiamos adquirido en la vega entre los cuales habia desde frutillas hasta sopa, todos las olimos y comentamos nuestros viejes y experiencias.
La segunda parte del trabajo era elegir tres ingredientes que nos recordaran algo, nos llevaran a una epoca y lugar de nuestras vidas que quedo marcada por esos olores. Mis ingredientes seleccionados fueron la manzana, las nueces y el jengibre, los cuales me transportaban a una una fecha, La Navidad, en donde mi mamá hacia su kuchen de manzana con nueces.
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